Dímelo Carliiiiiiiitos!!
Bienvenidos a la mejor lucha libre del mundo mundial. La mejor fricción y upskirts al ras de la lona entre las luchadoras más hot que los polígonos pueden formar en una Polystation 2 (The Poly Machine). Es Rumble Roses (Las Rosas Peleadoras, no confundir con las Rosas Espinozas)
Un juego a todo cachete
Antes de que el show comience, queridos fanáticos en sus casas, debo reconocer que en mis tortuosos años en el colegio yo era ultra fanático del cachacascán ¿y quién no lo era? Recuerdo esos años en que todos los cabros del curso jugabamos a las luchas de la WWF (world wildlife foundation) en la clase de religión, mientras el cojo Rojas se preocupaba de cuartearse a mis compañeras en lugar de enseñar sobre el niño Dios. Yo me subía a las mesas para hacer el vuelo del Condor. El tata Morales se creía "La Roca" y trataba de hacernos el "codazo del pueblo". Pero el compadre se parecía más al HHH, por la cayuya. Así que lo agarrabamos para el chuleteo diciendo que en realidad nos hacía el "narizazo del pueblo". También estaba el trolín del Maturana, al que le gustaba que los compañeros le aplicaran el "Pedigree". Pero eso ya es otro cuento.
Cuando ya había terminado el colegio, me di cuenta de que mirar las luchas no era algo muy viril que digamos. De que había acción y acrobacias entretes, había, pero igual era dificil ignorar el hecho de que todo lo hacían unos tipos ultra musculosos, sudorosos y en colaless. Más parecía un viernes femenino que otra cosa. De hecho, cuando la Señorita Guu (la dueña del sucucho donde vivo y que me sube el arriendo cada mes) se compró entradas en primera fila para el show de estos musculosos en Chile, comprobé que yo no estaba tan equivocado respecto al aire Vedetto del asunto. De paso también supe porque me subían tanto el arriendo de la pieza, esas entradas eran re caras.
Escenas típica de la lucha libre gringa
Mi interés en el cachacascán había desaparecido por completo debido a mis conclusiones sobre lo que brindaban esos shows. Sin embargo, mi interés en ver gente abrazada arriba de un ring con muy poca ropa volvió cuando me topé con el juego Rumble Roses del Poly 2. En este juego de cachacascán hicieron la cosa más inteligente sobre la tierra: reemplazaron a todos los cabeza de músculo del Pacific Gym por minocas poligonales ultra hot. Me faltaron manos para correr... a poner el juego en la negra de Sorny y cachar el mote. Lo que descubrí fue un juegazo de antología único en su especie, el cual fue injustamente criticado en su época. Así que aquí llega el Afro a hacerle justicia a esta obra maestra del voyerismo poligonal.
Estas luchadoras literalmente están que arden
Intro del juego
Hablanos de la épica historia, amigo Afro.
Cierto día, en las oficinas de la compañía Komami. Sus directivos ultra exigentes, esos que solamente dejaban pasar obras maestras cómo los Retard Gear, Castelvania SOB o Silencio, Gil, se fueron de parranda y entre terremotos y réplicas se les ocurrió programar Rumble Roses, he aquí lo que salió de esa larga reunión creativa.
Aunque ustedes no lo crean, en la federación de lucha WWX (warriors wenas para la X) no existen ni Undertaker, La Roca, HHH y menos FFF (fémina falo fóbica). Aquí solamente hay minocas dignas del poster central de la Playdude. En el ring de la WWX se han librado más batallas que cualquier ñoño que juega esta cuestión ha librado en su propio "ring". Las competidoras de este año son las siguientes:
It's raining hot chicks, aleluya!
Cosplay de Hinopoto. Una ñoña típica de esas que se ven en los eventos anime... si oh!!
El sapito de Benikage
Quién se apunta a clases intensivas?
Ni Forrest Gump hablaba tan horrible... pero a la larga llega a ser tierna
Así de grande!!
El diablo metió su cola
Bajos Instintos, the videogame
Y bueno, vale la pena jugar a esta cuestión? O simplemente sirve para entretener la vista un rato?
Pues claro que vale la pena. Cómo juego de lucha libre es uno de los más sólidos en cuanto a jugabilidad. Fue programado por los mismos mandriles que programan los juegos de la WWF todos los años, pero aquí la forma de pelear es más sencilla y espectacular que en los juegos de los musculosos en tanga. Cada peleadora tiene 3 movimientos especiales para hacer pebre a la rival, y de paso humillarla ante todo el respetable. Porque en cada llave que se haga, el ñoño jugador puede mover la cámara a su antojo y obtener esas tomas cochinotas que ni el Morandé con Compañía se atreve a mostrar.
Prepárate para un ANALisis
Y hablando de voyerismo y upskirts. También hay un modo en donde las luchadoras se enfrentan en luchas de barro. Ahi cambián sus atuendos por trajes de baño y se ensucian un poco. Aunque para ser sinceros, el efecto del barro en sus cuerpos deja bastante que desear. Lo mejor es tener a las niñas bien limpiecitas y perfumaditas.
Aquí se aprecia el poder del Poly2 a la hora de generar los paisajes, el agua, la arena, las te...
Zapatero a tus zapatos!!
Ayuda! Esta paciente sufre un grave caso de pérdida de polígonos
En fin, en cuanto a jugabilidad no nos podemos quejar. El juego tiene puras minocas, cada una con su versión "ruda" o "técnica" oculta, lo que da un total de 22 bellezas. Todas totalmente distintas entre sí, y además, mucho mejores que las del Dead or Pechuga, las cuales parecen ser todas la misma mona con distinta peluca. También hay mucha acción y variedad de golpes. Y por último, la música es de Komami, lo cual asegura calidad. Si hasta el Akira Yamaoka, que también andaba en el carrete de los ejecutivos de Komami, grabó un par de temas para este juego.
Recomiendas este juego entonces? Mira que el Dead or Pechuga nos ha acompañado en muchas noches solitarias como para dejarlo así de fácil.
Por supuesto. Ñoños fans del eye candy, les recomiendo este juego a ojos cerrados. No solamente tiene a las mejores bellezas virtuales de los 128 bits, sino que además no sacrifica la jugabilidad en pos de ello (como cierto juego de Volleyball califa que anda por ahi) No se dejen engañar por las injustas críticas negativas que rondan acerca de este juego por la internet, en donde solo se dedican a destacar lo ridículo de la historia y el voyerismo gratuito, sin tener en cuenta lo divertidas que resultan las peleas. Por mi parte, prefiero pasar una noche ñoña con todas estas titanias del ring, en lugar de pasarla jugando al Mario Gaylaxy. Rumble Roses es el juego perfecto para asados ñoños y para regalar a los hijos en esos años en que no tienen como desahogarse.
Atánganaaaa!!
CONCURSO!!
Escuincla babosa!